martes, 14 de septiembre de 2010
jueves, 2 de septiembre de 2010
LA MILI EN EL SIGLO XXI d. C.



Parafraseando a Ska-p, "Iba yo contento a casa, carta en la mesa del cuartel general,
recluto filas y veo tu cara, sargento romero, que cara angelical".
Pues si puretas, cual fue mi sorpresa cuando llegué a mi casa y vi la carta, debía presentarme el 3 de agosto de 2010 en el cuartel general de Oviedo!!! el único consuelo existente fue el de contar a mi lado con el soldado raso Pont (un perroflauta-empanao de una aldea toledana conocida por no se que de una diana). Así que los 2, con nuestros petates nos trasladamos en tren hacia nuestro destino, allí la sorpresa fue mayor, cuando además del anteriormente mencionado Sargento Romero se encontraba su subalterno Teniente Amelia, conocida por pertenecer a la familia de la dictadores Hebrero (familia acaudalada y cacique que durante decadas reina en la villa de Madridejos, famosa por la muerte a base de albaricoques en mal estado de uno de sus habitantes y de ser el pueblo que durante un dia quedo despoblado porque todo el mundo se enfado, y ya se sabe, si te enfadas te vas del pueblo).
A lo que iba, a nuestra llegada a Oviedo la bienvenida fue algo solitaria, tanto es así, que nadie fue a recibirnos y tuvimos que orientarnos y emplear nuestras técnicas aprendidas en Act. de la Naturaleza hasta el cuartel. Una vez en el cuartel fuimos recibidos por la Teniente Amelia, dejamos el petate y esperamos la llegada de la que durante esa semana fue nuestra peor pesadilla.
Durante esa semana, fuimos víctimas de las mayores atrocidades en cuanto al servicio militar se conoce, cada mañana éramos levantados a las 07.00 de la mañana con una canción que decía algo así como “No hay como el calor del amor en un bar. Jefe, no se queje y ponga otra copita más”, a lo largo de esas mañanas viajábamos a lo largo de la geografía Asturiana en autobuses o en Jeep a cargo de la Subcomandante Vila que nos torturaba con horas y horas de Sabina, los Secretos, y demás autores famosos en su época (recordar que Nuria Vila es veterana de guerra ya que combatió en la Guerra del Sporting para no bajar a segunda). También dormimos al raso en el pueblo de la Subcomandante Vila, donde fuimos atacados por diversos animales de la fauna asturiana, Continuando con nuestros días en la mili, decir que nos hacían correr largas horas por las playas de Gijón, como queda de manifiesto el video anteriormente publicado en la torre. El soldado Pont y yo, aguantamos tb largas horas de torturas andantes camino de monumentos asturianos y pueblos famosos, como el del Doctor Mateo.
Como esto se hace largo, y es hora de despedirse, dejando pendiente la segunda parte de la mili en el siglo XXI d.C. y como diría en este caso los Porretas “ayer registraron todas las taquillas, y el Sargento me ha quitado la ristra de morcillas, haz por acordarte y a ver si mandas otra, pero escóndemela bien en una caja de...
Antes de despedirme y saludando muy gratamente a la Sargento, la Teniente, Subcomandante y como no, a mi fiel compañero Pont, adjunto unas fotos donde se muestra nuestra penurias en tal cruenta mili…
Pd. Allí tb nos hicimos amigos del soldado raso Allen (un americano venido a menos, que nos amenizaba las noches intentando tocar el clarinete y contando sus proyectos de cine)
Un saludo, sean buenos, se despide de vosotros Pureta CAPI
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